¿Qué es Pranayama en yoga?
Pranayama o el arte de respirar.
El Hatha Yoga es un tipo de yoga que se basa en la práctica de una serie de posturas o asanas que, combinadas con la respiración consciente, tienen como objetivos fundamentales el fortalecimiento del cuerpo, la búsqueda de la calma y la capacidad de indagar sobre uno mismo. Es esa unión de ásana y respiración la que favorece la conexión entre el cuerpo y la mente y sin su existencia el yoga se reduce a un mero ejercicio físico.
El pranayama es el cuarto paso del “Yoga de los ocho miembros” o Ashtanga yoga de Patanjali (yama, niyama, ásana, pranayama, pratyahara, dharana, dhyana y samadhi). T.K.V. Desikachar afirma, en su comentario sobre el sûtra II.49 de los Yoga Sutra de Patanjali, que la práctica de ásana nos ayuda a comprender nuestra forma particular de respirar que está sometida a variaciones motivadas por cambios tanto externos como internos. Este autoconocimiento de la respiración es la base del pranayama.
Por tanto, el pranayama es la presencia consciente en el acto involuntario de respirar, al que se accede cuando se alcanza una práctica de ásana estable. Comprende la regulación de la duración, así como de las repeticiones de la exhalación (rechaka), la inspiración (puraka) y la retención que puede ser con aire en los pulmones (antar kumbhaka) o sin aire en ellos (bahir kumbhaka). Esta forma pautada de respirar procura la concentración de la mente, el cese de sus fluctuaciones y agitación y la obtención de la calma.
Etimológicamente, pranayama es un término sánscrito que significa “control o expansión de la respiración”. Prāná es aire, fuerza vital, respiración y iāma puede ser control, extensión, expansión o detención. Por lo que también se puede decir que el pranayama es el control y movimiento de la energía o la fuerza vital a través de la respiración.
Existen diferentes tipos de pranayama según los efectos que se desee conseguir: estimulantes, purificantes, refrescantes y regenerativos.
La postura sentada de meditación suele ser la más habitual para realizar pranayama. Debe ser cómoda y estable y permitir que la columna permanezca larga y alineada con la cabeza. Si esto no fuera posible, consulta con tu profesor si puedes tumbarte boca arriba.
Si nunca has practicado pranayama es aconsejable empezar poco a poco y siempre de la mano de un profesor experimentado. No olvides advertirle si tienes alguna dolencia o patología. Si durante la práctica sientes cierto aturdimiento o incomodidad, cesa el ejercicio y recupera tu respiración habitual.
La práctica de pranayama es una tarea que requiere voluntad, perseverancia y tiempo. Todos los profesores de El Gong podrán ayudarte a iniciarte en esta práctica o a profundizar más en ella. No dejes de preguntarles tus dudas y pedirles consejo.
Por Consuelo Serrano. Profesora de Hatha Yoga. @consueloserrano_yoga